Sunday, January 13, 2008

True Believer


Título: True Believer (2005)
Autor: Nicholas Sparks
País (impresión)/Editorial: USA/Warner Books
Páginas: 434
Leído del 6 al 10 de enero de 2008


Sitio Oficial del Autor

Buy: Barnes & Noble / Amazon


Quotes

He had assumed a false intimacy, acting as if he were everyone's brother or best friend, and it seemed that the vast majority of the awestruck audience -including the attractive blonde and the woman the guest was addressing- considered him a gift from heaven itself. Which made sense, Jeremy thought, since that was always where the lost loved ones ended up. Spirits from beyond the grave were always surrounded by bright angelic light and enveloped in an aura of peace and tranquility. Never once had Jeremy heard of a spirit guide channeling from the other, hotter place. A lost loved one never mentioned that he was being roasted on a spit or boiled in a cauldron of motor oil, for instance.
p. 2


Investigative journalism, he'd come to learn, was a thankless business.
p. 7


He snapped a picture of the magnolia tree as well. It was easily the largest he'd ever seen. Its black trunk was wizened, and the low-hanging branches would have kept him and his brothers occupied for hours when they were boys. If it weren't surrounded by dead people, that is.
p. 49


Then again, perhaps her visit here was simply a coincidence.
She continued moving toward him.
Come to think of it, a rather attractive coincidence.
p. 50


Again, the same cowlike expressions from patrons as he passed. Conversations quieted. Eyes drifted. When he nodded and waved, eyes dropped and the murmur of conversation rose again. This waving thing, he thought, was kind of like having a magic wand.
p. 55


"He was always a talker. He'd talk to a shoe box if no one else was around, and I swear I don't know how his wife, Bonnie, put up with it for so long. But twelve years ago, she went deaf, and so now he talks to customers. [...]
Jeremy reached for his coffee. "His wife went deaf?"
"I think the Good Lord realized she'd sacrificed enough. Bless her heart."
p. 59


Modern, it definitely wasn't. It wouldn't have been modern thirty years ago. [...] It was scenic, he had to admit, but the rustic part probably referred to mosquitoes and alligators, neither of which summoned up a lot of enthusiasm in him for staying there.
pp. 106 - 107


Dressed in green polyester pants and a blue turtleneck sweater, the man looked as if he'd dressed in the dark.
p. 107


The place was the Museum of Natural History transformed into a horror movie and squeezed into a closet.
p. 111


And besides, he didn't honestly care if the world came or not, as long as Lexie stayed part of his world.
p. 201


"That's fine," he said. "I'm all for you changing into something more comfortable."
"I'll bet you are," she said knowingly.
"Now, don't start getting fresh," he said, feigning offense. "I don't think we know each other well enough for that."
"That's my line," she said.
"I thought I'd heard it somewhere."
"Well, get your own material next time. And just so you know, I don't want you getting any funny ideas about tonight, either."
"I have no funny ideas. I'm completely devoid of humor."
pp. 226 - 227


"I thought you'd just have a video camera or something like that."
"I do. I have four of them."
"Why do you need four?"
"To film every angle, of course. For instance, what if the ghosts are walking in the wrong direction? I might not get their faces."
p. 229


[...] "What are you doing here, Jeremy?"
It was a moment before he answered. "I wasn't sure you were coming back," he said. "And I realized thsat if I wanted to see you again, the best option was to come to you."
"But why?"
Jeremy continued staring toward the lighthouse. "I felt like I didn't have a choice."
"I'm not sure what that means," she said.
Jeremy studied his feet, then looked up and smiled as if in apology. "To be honest, I've spent most of the day trying to figure it out, too."
pp. 295 - 296


[...] Jeremy peeked over her shoulder, watching as the butter began to melt.
"Looks healthy," he said. "My doctor always told me I needed extra cholesterol in my diet."
p. 306


"[...] If you want to sacrifice me, I can live with that. [...]"
p. 395

Saturday, January 5, 2008

Todo Está Iluminado


Título: Todo Está Iluminado (2007)
Everything Is Illuminated (2002)
Autor: Jonathan Safran Foer
País (impresión)/Editorial: Argentina/DeBols!llo
Páginas: 344
Leído del 2 al 5 de enero de 2008

Quotes
Madre es una mujer humilde. Muy, muy humilde. Trabaja en un pequeño café a una hora de distancia de casa, donde sirve comida y bebida a los clientes. Siempre me dice: "Me subo cada día al autobús durante una hora y paso el día haciendo cosas que odio. ¿Quieres saber por qué? Pues por ti, ¡Alexi-no-me-fastidies! Un día tú harás cosas que odies por mí. Eso es lo que significa ser una familia". Lo que no pesca es que ya hago por ella cosas que odio. La escucho cuando me habla. Me resisto a quejarme sobre mi pigmea asignación. ¿Y he mencionado que no la fastidio tanto como desearía? Pero no hago todas estas cosas porque seamos una familia. Las hago porque obedecen a la decencia más elemental. Es una expresión que me enseñó el héroe. Las hago porque no soy un capullo de mierda. Esta otra expresión también me la enseñó el héroe.
p. 11


Me siento de nuevo obligado a tragarme otro trozo de mi orgullo (mi estómago ya empieza a estar repleto) [...]
p. 42


Como ya preveía, mis chicas se pusieron muy tristes al saber que no estaría con ellas para la celebración del primer cumpleaños de la nueva constitución. "Noche entera", me dijo una de mis chicas, "¿cómo se supone que voy a darme placer en tu vacío?" Yo tenía una liviana idea. "Baby", me dijo otra, "no está bien". Yo dije a todas lo mismo: "Si fuera posible yo estaría aquí contigo, siempre. Pero soy un hombre que trabaja, ¿no?, y debo ir a donde debo ir. Necesitamos dinero para los clubes famosos, ¿no? Estoy haciendo algo que odio por ti. Esto es lo que significa estar enamorado. Así que no me fastidies".
p. 43


En una ocasión, Padre fue a Praga, en servicio para Turismo Ancestral, y mientras reposaba los guardias tomaron varias cosas primordiales de su maleta, lo cual es terrible porque no posee muchas cosas primordiales. (Resulta tan raro pensar en alguien haciendo daño a Padre. Tengo tendencia a creer en la inmutabilidad de los roles.)
p. 50


"No te angusties", le informé, mientras Sammy Davis, Junior, Junior se golpeaba la cabeza contra el cristal. "Es solo la perra guía del conductor." Señalé la camisa que llevaba puesta, pero ya había mordido la mayor parte, de manera que solo se leía: PERRA OFICIAL. "Está desquiciada", dije, "pero le gusta mucho jugar."
p. 51


Le hablaba como si ella pudiera entenderle, nunca en un tono de voz chillón o en monosílabos, y nunca con palabras sin sentido. Esto que estás tomando es leche. La trae Mordechai, el lechero, a quien ya conocerás algún día. Él saca la leche de las vacas, lo cual, si te paras a pensarlo, es algo bastante raro e incluso inquietante, así que mejor no pienses en ello...
p. 60


Cuando lo sacaba para darle de comer o simplemente para sentirla en sus brazos, el cuerpo del bebé aparecía tatuado con la tinta del periódico. [...] En ocasiones la acunaba en sus brazos hasta dormirla, y la leía de izquierda a derecha, enterándose de todo cuanto necesitaba saber acerca del mundo. Si no estaba escrito en su piel, carecía de importancia.
p. 61


Despertaba cada mañana con el deseo de hacer el bien, de actuar con bondad y coherencia; de ser, por sencillo que parecía y por imposible que era en realidad, feliz. A lo largo del día el corazón le bajaba del pecho al estómago. A primera hora de la tarde le asaltaba la sensación de que nada estaba bien, o al menos no para él, y le envadía el deseo de estar solo. Al anochecer había cumplido su deseo: solo en la magnitud de su dolor, solo en una culpabilidad confusa, solo incluso en su soledad. No estoy triste, se repetía a sí mismo una y otra vez, No estoy triste. Como si así pudiera llegar a convencerse algún día. O engañarse. O convencer a los otros, ya que lo único peor que estar triste es que tu tristeza sea de dominio público. No estoy triste. No estoy triste. Porque su vida, vacía estancia blanca, poseía un potencial ilimitado para la felicidad. Caía dormido con el corazón a los pies de la cama, cual animal doméstico, pero por la mañana, al despertar, volvía a tenerlo en el altillo de las costillas, un poco más pesado, un poco más débil, pero todavía en marcha. Y a media tarde le sobrevenía de nuevo el deseo de estar en otro lugar, de ser alguien distinto, de ser alguien distinto en otro lugar. No estoy triste.
pp. 65 - 66


¿Puede ser bonito aun cuando nadie lo cree así?
Yo creo que lo es.
¿Y si sólo lo crees tú?
Entonces aún es más bonito.
¿Y qué me dices de los chicos? ¿No quieres que piensen que eres bonita?
No querría a un chico que pensara que soy bonita si no se tratase de la clase de chico que me encontrara bonita.

p. 101


[...] y cuando él le compró un libro sobre fisiología animal, Brod le plantó los dibujos delante de las narices y le dijo: ¿No te parece extraño, Yankel, cómo nos los comemos?
Yo nunca me he comido un dibujo.
Los animales. ¿No lo encuentras raro? No recuerdo haberlo encontrado raro antes. Es como tu nombre, te pasas años sin prestarle atención, pero, el día que lo haces, no puedes evitar repetirlo una y otra vez, y te preguntas por qué nunca te pareció raro que ese nombre fuera el tuyo cuando todo el mundo te ha estado llamando por él durante toda tu vida.
Yankel. Yankel. Yankel. No me suena raro.
No volveré a comerlos, al menos hasta que deje de parecerme raro.
p. 1o1


Ámame, porque el amor no existe, y yo ya he intentado todo lo que sí existe.
p. 108


Se entregaron recíprocamente a esa gran mentira salvadora - que nuestro amor por las cosas es mayor que el amor que sentimos por el amor a las cosas-, representando deliberadamente los papeles que escribieron para sí mismos, creando y creyendo deliberadamente en esas ficciones que resultan imprescindibles para vivir.
p. 109


Comprendo lo que escribes cuando escribes que Brod no ama a Yankel. Esto no significa que ella no sienta cantidades por él, o que no se ponga melancólica cuando él fallezca. Es otra cosa. El amor, en tu novela, es la inmutabilidad de la verdad. Brod no es sincera con nada. Ni con Yankel ni con ella misma. Todo está a un mundo de distancia del mundo real. ¿Esto posee sentido? Si estoy sonando como un pensador, es un homenaje a tu novela.
p. 135


Cuando Brod pregunta a Yankel por qué piensa en su madre aunque esto le duela y él le dice que no sabe por qué, es un momento decisivo. ¿Por qué lo hacemos? ¿Por qué las cosas malas tienen tanto electromagnetismo?
p. 135


Nunca habían conocido esa profunda intimidad, esa cercanía que surge solo de la distancia.
[...]
En ese silencio alcanzaron esa nueva intimidad, la intimidad de las palabras mudas.
p. 173


Lo único más doloroso que ser un olvidador activo es ser una recordador inerte.
p. 325


Y esto era lo que sucedía cuando alguien trataba de hablar: su mente quedaba confundida por la telaraña de recuerdos. Las palabras se convirtieron en riadas de pensamiento sin principio ni fin, que ahogaban al hablante antes de poder llegar al bote salvavidas: al punto que deseaba expresar. Era imposible recordar lo que uno quería decir, lo que pretendía explicar tras aquel aluvión de palabras.
p. 327


Aguardaban la llegada de la muerte, y no podemos culparles, porque nosotros habríamos hecho lo mismo, hacemos lo mismo. Bromeaban y se reían. Pensaban en las velas de cumpleaños y aguardaban a la muerte, y debemos perdonarles.
p. 328


El universo se derramó en una explosiva embestida de vómito celestial.
p. 333


Gracias a Silver, por prestarme este libro!

Welcome

I should have done this several years ago... but I've always sucked at keeping diaries.

In this blog, I wish to write down every single book I've ever read. From now on, I will post which book I'm reading, as well as my favorite quotes from it and thoughts about it. As for the books I read a long time ago, I will do my best to (at least) enlist them.

This is it: my place to live amongst my favorite characters and their authors.

Good reading!